Ya hemos estrenado. Un día antes que el resto del Festival Off de Avignon, así trabaja el Théâtre de la Luna donde estamos, se anticipa a los otros teatros que inundan Avignon. El programa de mano del Festival Off crece cada año. Cuando vine en el 2001 con Chair de Papillon, un espectáculo que dirigí para Damien Bouvet, el programa era más fino, lo podías doblar en la bolsa. Ahora es imposible, parece un catálogo de unos grandes almacenes. 1.300 espectáculos en papel, con una media de espectadores, hablo de oídas, de 10 espectadores por sala. Nosotros tuvimos una media más alta: 41 espectadores. Y todos contentos: a pesar del Francia Alemania del Mundial, a pesar de la lluvia, vino gente. Mucha lluvia, tanta que el internet de la casa se desmadró y voy buscando los rincones donde hay cobertura para mandados esta crónica. Hay que volver a revisar los carteles empapados y caídos por el peso del agua. El famoso “affichage” de Avignon. Te vas a comer y cuando sales del restaurante ya no hay paredes, ya no hay vallas y farolas libres. La piel de la ciudad se colorea y tatúa de nombres de artistas y colores. Hay dos escuelas: o agujereas tu póster y así lo cuelgas directamente o lo pegas primero en un cartón y luego lo cuelgas. Si agujereas el póster se puede doblar más fácilmente y pierdes visibilidad, la gran tarea del Off, ser visible, pero si lo pegas en cartones el tiempo que empleas es enorme. El nuestro está agujereado, como la oreja izquierda de Sergi López. Nosotros pagamos a alumnos del Conservatorio de Avignon para que los distribuyeran por la ciudad. Vinieron a ver el espectáculo y les gustó. Mejor, así tienen argumentos para la segunda fase, el “tractage”, los programas de mano que repartirán uno a uno, 10.000. Posters, mil. Si parecen muchos el Festival repartirá 150.000 programas a lo largo del mes. Pero la notícia ayer fue que los “intermittents du spectacle”, los técnicos que trabajan en el Festival In, el oficial, se declaraban en huelga para proteger unos derechos laborales que les permiten alternar días de trabajo con días de paro remunerado en un mismo mes. Un sistema único en el mundo en peligro. Desde España produce envidia laboral sana y la lectura es que nos vamos igualando, pero a la baja, tal y como se lo contamos a la gente del Ramón Llull (aprofite per a donar les gràcies, Raúl, Berta, Anna, Susanna, Teresa, Lavinia…) Para el gobierno socialista de Hollande, un gasto. Militancia, es la palabra más usada. Militancia y un pequeño trozo de tela rojo que muchos llevamos alfileado en la camisa. El espectáculo que abría este Festival “Le Prince de Hombourg” de Von Kleist, dirigido por Giorgio Barberio Corsetti estrenará hoy. y nosotros nuestra segunda función, quedan 23 funciones. Un maratón de teatro.