Ciudadano Jesús Taller al Institut de Teatre de Barcelona (director y autor)

“Allí donde la virtud de la luz sobrenatural está ausente, todo obedece a leyes mecánicas, tan ciegas y precisas como la ley de caída de los cuerpos” .

Simone Weil
Nota programa de mano

Nuestra obra empieza con cuatro periodistas leyendo una noticia titulada “Socorro”. Uno de ellos pide espacio en el diario porque tiene un relato que comunicar al mundo, un relato que le llevará hasta el corazón del neoliberalismo: los Estados Unidos de América. Si un periodista acaba ocupándose de la dignidad humana negada de manera estructural, su vida, corre peligro. “¿Quién decís que soy yo?” Ciudadano Jesús, pero no lo digáis a nadie.

Fragmento del dossier del taller   
 
                       

“A lo largo de los siglos, muchos millones de personas han venerado el nombre de Jesús; pero muy pocas le han comprendido, y menor aún ha sido el número de las que han intentado poner en práctica lo que él quiso que se hiciera. Sus palabras han sido tergiversadas hasta el punto de significar todo, algo o nada. Se ha hecho uso y abuso de su nombre para justificar crímenes, para asustar a los niños y para inspirar heroicas locuras a hombres y mujeres. A Jesús se le ha honrado y se le ha dado culto más frecuentemente por lo que no significaba que por lo que realmente significaba. La suprema ironía consiste en que algunas de las cosas a las que más enérgicamente se opuso en su tiempo han sido las más predicadas y difundidas a lo largo y ancho del mundo… ¡en su nombre!” A. Nolan, ¿Quién es ese hombre? Ed. Sal Terrae, Santander 1981, pág,. 13. 

Planteamiento dramatúrgico y declaración de intenciones.

La vida de Cristo es una hermosa biografía que da vida al sueño de los héroes y aliento ideal, en el sentido de ser mejores, a quien la escuche, una vida rebosante de plasticidad pues no estamos hablando de ideas abstractas, sino de una persona. Si no la conoces puede que suene a una endurecida fórmula, pero estoy seguro que el escenario la puede refrescar. Siempre me ha parecido que el cristianismo es la religión del recuerdo: “Haced esto en conmemoración mía” No se trata de abordarlo solamente desde la óptica del creyentes o no creyente, sino desde la sensibilidad del artista. Verlo como una memoria subversiva y subyugante, como una fuente de irradiación. Una vida llena de comportamientos, de actos y de hechos y no de debates ideológicos (…)

Más información en la web del Institut del Teatre